(La información es de La Tercera)
La Corte Suprema dio pie atrás a la decisión de comprar 22 autos marca Lexus para sus ministros.
El Pleno del máximo tribunal se reunió esta mañana para abordar la polémica decisión que había sido aprobada por el mismo órgano el 2 de febrero con la finalidad de renovar su flota vehicular. Luego de dos horas, fue el secretario de la Suprema Jorge Sáez quien entregó las definiciones de la cita en un comunicado de seis puntos.
“El Poder judicial es autónomo en la ejecución de su presupuesto”, comenzó diciendo, y agregó que “la decisión de renovar los vehículos institucionales asignados a la Corte Suprema en el año 2014, se funda en antecedentes técnicos y de seguridad, prefiriéndose estándares de sustentabilidad ambiental”.
“Son esas y no otras consideraciones las que se tuvieron a la vista para, adoptar en su momento, la aprobación de la renovación de los vehículos”, agregó sobre esto último. “Este Tribunal no es ajeno a la contingencia y al contexto de los acontecimientos que preocupan al país”.
Así las cosas, el secretario apuntó a la eventual aprobación que ya había habido por parte del Ejecutivo. “Se debe puntualizar que si bien la Ley de Presupuesto para el año 2024 no contempló la citada renovación, lo cierto es que la Dirección de Presupuesto dependiente del Ministerio de Hacienda, comprometió el 9 de noviembre del año recién pasado ante la Comisión Especial Mixta de Presupuesto, la autorización de fondos adicionales provenientes del saldo inicial de caja para necesidades manifestadas por el Poder Judicial, (…) ratificándose el acuerdo previo adoptado por el Ministro de Hacienda con el ex Presidente de la Corte Suprema y dos Ministros Consejeros de la Corporación Administrativa del Poder Judicial, y el Director de esta última, que incluía la renovación de los vehículos institucionales.