(La información es de Radio Futuro)
Rush y Kiss son dos de las bandas más importantes del rock que nacieron en la década de los 70. Y como pasa en ciertos casos, el ser contemporáneos llevó a que no solo se formara una buena relación entre ambas, sino que incluso salieron juntos de gira.
El tour en cuestión se desarrolló en 1975, cuando los canadienses fueron teloneros de los estadounidenses, en la presentación del segundo disco de estos, Fly By Night. Sin embargo, al contrario de las fiestas que uno puede pensar compartieron los grupos, en realidad tenían maneras distintas de vivir los post conciertos.
Por un lado, Kiss aprovechaba la noche en algún local o armaba algo propio con alcohol y chicas. No obstante, Geddy Lee, Neil Peart y Alex Lifeson hicieron que a Gene Simmons le explotara la cabeza porque nunca salían de su habitación. «¿Qué carajos están haciendo?», se preguntaba el bajista, como muestra el documental Rush: Beyond the Lighted Stage (2010).
La dispar manera de entretenerse de Rush y Kiss
El misterio en cuestión lo ha resuelto el propio Lee, quien en conversación con Q104.3 relató lo que sucedió dentro las cuatro paredes de la pieza del hotel en la que se quedaban.
«La verdad, estábamos fumando una cantidad increíble de porros… ¡eso es lo que estábamos haciendo! Y viendo The Twilight Zone («La dimensión desconocida») después. Así que, sí, nos estábamos riendo. Lo estábamos pasando genial”, narró entre risas.
Pese a esto, Kiss también tenía que ver, ya que como confiesa el bajista, «no se podía competir» con las fiestas que daba el legendario cuarteto.
«Éramos como recién nacidos. Éramos bebés. No sabíamos nada de la industria, no sabíamos nada del mundo de las giras», señala.
En esa línea, al trío de todos modos le gustaba curiosear y sacaban la cabeza por la puerta de vez en cuando. Ahí, veían a Simmons, Paul Stanley, Ace Frehley y Peter Criss con sus maquillajes puestos.
«Volvían a casa del concierto totalmente maquillados porque si no, ¿cómo iban a saber las chicas que eran los que tocaban en Kiss, verdad?, cuenta Geddy. «¡Soy Gene Simmons! ¡Sí, claro! Pero sí, era un circo cada noche y era muy divertido de ver».